Los viajes de Rubén Darío a Mallorca

La literatura de viajes tiene en el sueño modernista una de sus más ricas manifestaciones, un sueño continuador de las peregrinaciones románticas y premonitorio del sentimiento de exilio que traspasará la conciencia de tantos creadores en el siglo XX. Nadie mejor que Rubén Darío —viajero infatigable de mirada maravillada y no menos doliente— para descubrir el sentido de la crónica y la narración de viajes que nos legó el modernismo y que adoptó diversas formas: el viaje novelesco, el viaje exótico, el viaje esotérico, el viaje interior…, destellos que alumbran la experiencia de nuevas generaciones de artistas y literatos hasta llegar a nuestros días.

En la vida errante de Darío existe una estación importantísima: la isla de Mallorca, que visita en 1906 y en 1913, y que se convierte en su refugio espiritual. En cada una de estas estancias, Darío intentará novelar el acontecer de su viaje desde dos perspectivas: el dibujo lírico del paisaje mediterráneo, lleno para él de evocaciones grecolatinas; y el relato confesional, donde plasma sus fantasmas interiores.

Ofrecemos aquí una nueva edición de La isla de oro y El oro de Mallorca —novelas inconclusas— revisada y cuidadosamente anotada por el Dr. Fernández Ripoll. Se recobra así una producción narrativa de un valor literario intrínseco, que fue noticia importante sobre el archipiélago balear para muchos escritores y artistas españoles y latinoamericanos que, siguiendo las huellas de Rubén Darío, eligieron estas tierras como espacio de culto artístico.